La última tanda de ladrillos llegó con la lluvia del mediodía, justo antes del puchero. Pese al frío y al agua, era la última: estamos en la etapa final. Llegado este punto, es necesario agradecer al ingeniero, dueño de la fábrica de refractarios de City Bell Refrasur, por los consejos y la confianza.
La construcción de cámara requiere un esqueleto de sostén para poder poner los ladrillos y que mantenga esa línea orgánica y anatómica. En este caso estamos usando cañas de la zona (esta es una zona muy húmeda, con muchos cañaverales y totoras). Lo bueno de usar cañas es que las curvas que producen son muy naturales, la curva demasiado exigida se quiebra
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